viernes, 28 de octubre de 2011

Condena en el juicio a la ESMA

La hora de los aparecidos

 

Lavaca

 

 

En el barrio de Retiro, planeta Tierra, un poco más allá de los trenes y la villa, culminó parte de una extraña tarea: juzgar al infierno. El infierno no es metafísica religiosa, sino una institución terrestre, trasnacional, con más sucursales de las que uno quisiera imaginar. Alfredo Astiz con sonrisa deforme y escarapela redonda, y Jorge “El Tigre” Acosta momificado, fueron parte de la docena y media de integrantes de los grupos de tareas de la ESMA sometidos a juicio después de 30 años de impunidad:

  • 12 fueron condenados a prisión perpetua: Alfredo Astiz, Jorge Acosta, Ricardo Cavallo, Antonio Pernías, José Montes, Raúl Scheller, Jorge Rádice, Adolfo Donda, Alberto González, Néstor Savio, Julio César Coronel, Ernesto Weber.
  • Dos resultaron absueltos: Juan Carlos Rolón y Pablo García Velazco, que siguen presos e imputados en otras causas.
  • Dos tuvieron penas de 25 años de prisión (Manuel García Tallada y Juan Carlos Fotea), uno 20 años (Carlos Capdevilla) y otro 18 (Juan Antonio Azic).
  • Las acusaciones abarcaron el masivo secuestro alrededor de la Iglesia de Santa Cruz (11 personas, incluyendo a tres de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo y a dos monjas francesas) y casos como el de la desaparición de Rodolfo Walsh, entre 86 víctimas de secuestros, torturas y homicidios.

Cada anuncio de prisión perpetua era recibido en la sala de la planta baja con un sutil murmullo de aprobación. La sentencia fue leída ante ese recinto separado de las butacas de los genocidas y sus defensores por un vidrio blindado. La sensación de tener a gente como Astiz a tres metros de distancia es rara. El público en esa planta baja incluyó principalmente a sobrevivientes de la ESMA, familiares y amigos de desaparecidos, Madres, Abuelas, juristas, integrantes de organismos de derechos humanos y personas que llevaron adelante lo que demasiadas veces pareció una causa perdida: que se haga justicia.

Y otra parte de ese universo estuvo en la calle, reuniendo también a trabajadores de sindicatos, estudiantes, nietos recuperados, murgueros, artistas y otros sobrevivientes. Los aparecidos en la Argentina no son fantasmas ni espectros, sino todo lo contrario: frente al país de los desaparecidos, el genocidio y la muerte, son los que se presentan, superan el miedo, los que hablan, desobedecen, denuncian, no se resignan, contagian. Tienen herederos en cantidad de experiencias sociales de todo tipo nacidas en las últimas décadas. Son los que este 26 de octubre se abrazaban, reían y lloraban, mientras del otro lado del blindex una docena y media de marinos adelantaban las manos para que la policía volviera a ponerles las esposas, antes de regresar a prisión.

Bandeja alta

El público de la bandeja alta, se sabe, está formado por personas cercanas a los militares. Tres hombres canosos y trajeados esperaban su acreditación para ingresar al sector en el 6º piso del edificio de Comodoro Py, donde también estaban familiares de asesinados y desaparecidos. Mientras el personal del Tribunal intentaba ordenar a tanta gente, uno de los canosos murmuró: “El zurdaje que vaya a otro lado”. El sólo uso de la palabra “zurdaje” implica acaso esclerosis múltiple, perversión militante, o que sigue siendo aconsejable no subestimar la estupidez humana. Ya en la bandeja alta las mujeres decían cosas como “mirá a Alfredo, es un ídolo”. Alfredo era Astiz, infiltrado entre los familiares en la dictadura con el falso nombre de Gustavo Niño, encargado de marcar sobre todo a las Madres. Pendiente de la cámara, Astiz se colocó una escarapela redonda cuando lo enfocaban, y se la manoseaba como planchándola. Sonrió varias veces. En el comienzo del juicio había hecho lo mismo exhibiendo un libro llamado “Volver a matar”. Cuando la cámara dejó de enfocarlo, Astiz se convirtió en estatua, aniquilado por tal indiferencia televisiva.

En la bandeja alta acompañaron las condenas con risas displicentes, intentaron cantar Aurora con un entusiasmo patético, y tiraron papelitos.

Desde abajo se escuchaba a los aparecidos cantando: “Como a los nazis les va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar”.

Condenas y cumbias

En la calle la cita era a las 17 y a esa hora frente a la mole gris de los tribunales de Comodoro Py quedaba claro quiénes están desde siempre y desde la primera hora. La Agrupación HIJOS ya tenía montado el escenario donde se emitirían los videos con los prontuarios de los genocidas sentenciados. En el asfalto, los trabajadores. El Sindicato de Televisión (CGT), ATE Capital, el de los estibadores del puerto, el de los empleados judiciales, sin cánticos y con pocas banderas, sin alarde y con estoica firmeza, vieron ir llegando a los cientos que, de a dos, de a tres o de a seis, fueron inundando, gota sobre gota, la puerta de Comodoro Py. El micrófono estuvo a cargo de los jóvenes, de los HIJOS. Como en los tiempos de la Mesa de Escrache Popular la inconfundible música de Actitud María Marta sonó para recordar cómo se logró que aparezca esta justicia, al igual que la única consigna cantada también allí a viva voz por la multitud: “A dónde vayan los iremos a buscar”.

Ángela Urondo, la hija de Paco, leyó un poema que el desaparecido Mario Gali escribió en 1973 como para hacer explícito lo que allí estaba en escena: ser los ojos, los oídos y la voz del gran acto de justicia que es la memoria.

Demoró más de tres horas verlos en la gran pantalla, sentados en el banquillo, mientras el frio y la tensa espera fue tensando el ánimo: “35 años y todavía tienen que discutir el fallo”, se murmuraba.

Graciela Daleo, una de las sobrevivientes y testigo de la causa, se aferraba a los abrazos. Un poco más allá Victoria Donda, con la mirada húmeda, se acurrucaba en el cariñoso gesto de sus compañeros. Dos pasos más acá, el ahora diputado bonaerense Víctor De Genaro y por allá, el ahora funcionario del Ministerio de Seguridad, Ricardo Dios, vestido de traje, y presente como hijo de desaparecido.

Cada uno, cada quien, fue puro silencio cuando a las 20.18 comenzó la lectura de la sentencia. Ese silencio que se hace escuchar y sentir y se convierte en latido colectivo. El grito estalla con la primera condena a perpetua y se repite una docena de veces hasta convertirse en apretones, palmadas, miradas que se entrecruzan para dar cuenta de la intensidad del momento compartido. Luego, increíblemente, suena una cumbia. Y otra. Y otra más. Bailan las Madres. Bailan los trabajadores. Bailan los Hijos. Bailan los veteranos referentes de derechos humanos -como Graciela Rosemberg, de la Liga- y chicos de seis, diez o tres años. Bailan los sobrevivientes, Alguna vez fue Sting el que nos cantó “Ellas bailan solas”. Lo que parece sentirse hoy ahí, en la calle de Comodoro Py, es exactamente eso: la alegría del fin de 35 años y tres horas de una poblada, injusta, impune soledad.

Voces

Lilia Ferreyra (última pareja de Rodolfo Walsh, integra actualmente el Centro de Estudios Legales y Sociales) dijo a lavaca: “Estoy muy conmovida. Recuerdo el título del último cuento publicado de Rodolfo: “Un oscuro día de justicia”. Hoy se iluminó. Al escuchar la sentencia sentía que de algún modo era la respuesta al alegato que el propio Rodolfo escribió hace 35 años en su Carta Abierta a la Junta Militar. Y escuchar que también son condenados a perpetua los responsables no sólo por la desaparición de Rodolfo y todos los demás. Pero hablando de lo más personal e íntimo, siento la conmoción de haber podido sobrevivir, porque todos esos textos inéditos de Rodolfo que se secuestraron y por los cuales ahora están siendo condenados, yo era la única que los conocía y estaban en nuestra casa de San Vicente. Al mismo tiempo es sentir esa tensión entre la vida y la muerte, y lo que puede significar la vida cuando sirve de testimonio por los crímenes cometidos. Mi cuerpo se enfermó antes de esto. Colapsó. Estuve una semana sintiéndome físicamente muy mal. Algo se desarticulaba. Y es curioso. Hoy es como que me siento que todo volvió a encajar. Las partes encajan. El pasado y el presente encajan en este momento de justicia”.

Graciela Daleo (secuestrada en la ESMA, una de las principales testigos en todos los juicios que se vienen llevando a cabo incluyendo el de los ex comandantes en 1985): “Yo que tengo tantas palabras, casi no tengo ninguna. Salvo para decir que celebremos este claro día de justicia, que no es un techo sino un piso en el que nos afirmamos para seguir la lucha. Y lo que rescato es que, sobre todo, esto hace aparecer a nuestros compañeros como militantes políticos y luchadores. Y a nosotros también. Por eso nos desaparecieron. Y ahora, a quienes aparecimos nos hace seguir tratando de contribuir a lo que es el resultado de una lucha colectiva. Hubo organizaciones de nuestro pueblo que tuvieron innegablemente una dinámica profunda para que esto ocurra, como las organizaciones de derechos humanos. Pero esto es colectivo. Ojalá lo viva como una victoria todo nuestro pueblo. No puedo dejar de señalar que este triunfo ha sido muy costoso. Jorge Julio López está desaparecido y él también contribuyó a esto. Que las próximas victorias incluyan también el castigo a los culpables de la desaparición de Julio”.

Eduardo Luis Duhalde (abogado, militaba junto al diputado Rodolfo Ortega Peña asesinado por la Triple A, logró escapar tras el golpe y fue activo participante en las campañas de denuncias internacionales contra la dictadura. Hoy es Secretario de Derechos Humanos). Dijo a lavaca: “¿Qué sensación puedo tener? El 24 de marzo de 1976 por la noche fueron a buscarme al domicilio donde creían que yo estaba, pero yo iba cambiándome, iba más adelantado que ellos, hasta que pude salir del país. Hoy no puedo decir que esto me produzca alegría; hay 86 muertos, desaparecidos, pero la sentencia condenatoria es la satisfacción de haber logrado que se hiciera justicia”.

Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora: “Es importante esta condena, pero tenemos que seguir, se tienen que abrir los archivos para que se sepa qué pasó con cada uno de los desaparecidos, y se sepa a quién entregaron los chicos de desaparecidos. No tiene que quedar un solo genocida impune. Lo que ellos no hicieron, lo hacemos nosotros, que tengan un juicio justo que se lleva a cabo con total respeto”.

Ana Careaga (ella misma fue secuestrada cuando tenía 16 años, embarazada, lo que hizo que su mamá, la paraguaya Esther Ballestrino de Careaga, se convirtiera en parte del grupo fundador de Madres de Plaza de Mayo. Ana resultó liberada, pero Esther resolvió seguir junto a las otras Madres, y terminó siendo ella una de las desaparecidas. Ana preside hoy el Instituto Espacio para la Memoria): “Es un día histórico, pero es importante después de 35 años seguir avanzando para que la sociedad tome conciencia de los crímenes aberrantes que vivimos. Después de dos años en este juicio, uno no puede salir igual que como entró a él. Esto tiene que ver con toda la sociedad argentina, no solo con las víctimas. Esto no se cierra, falta mucho todavía, hay que reformar los juicios, buscar la manera de hacerlos con mayor celeridad, pero bueno, siempre se luchó así y así se fueron consiguiendo las cosas. Pero los que tiraron gente viva al mar tienen que pagar por esos delitos. Es muy importante seguir avanzando en la búsqueda de justicia, pero este es el avance que ha logrado la lucha histórica de derechos humanos”

Estela Carlotto (presidente de Abuelas de Plaza de Mayo): “Esto fue escuchar las voces es lo que sentimos en nuestro corazón. Recordar a nuestros queridos desaparecidos. Estos bestias que parecen humanos, pero no lo son, entraron esposados, y ahora perpetua, cárcel común. Sin ninguna venganza, sino lo que corresponde en un país democrático, juzgar a semejantes bestias. Salimos bien. Yo creo que es una inyección para seguir luchando por lo que viene adelante. Por lo que falta. Sabemos que estamos condenando a los más feroces. Faltan los civiles, los jueces cómplices, ya se ha comenzado con eso. Y encontrar 400 nietos. Pero no hay que aflojar. Falta, pero hay que seguir avanzando. A Astiz no lo quería ni mirar porque tenía un rictus como de sonrisa. Muy patriota con la escarapela, pero no importa: ya está condenado”.

Adolfo y Perla Mango (del Equipo de Derechos Humanos de la Iglesia de Santa Cruz. Allí se reunían los familiares, y fueron infiltrados por Alfredo Astiz. Once de esos familiares fueron desaparecidos, incluyendo a Azucena Villaflor de Devincenti, Mary Ponce de Bianco y Esther Careaga, y las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet): “Esto ha provocado un montón de sensaciones, de alegría, de dolor. Escuchamos y acompañamos lo que dijeron las víctimas, y estuvimos estos dos años apoyándolos todas las semanas. Lo más importante es que se hizo justicia”.

Gastón Chillier, director ejecutivo del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) destacó la recomendación del Tribunal a Naciones Unidas para que incorpore la eliminación de una persona por sus ideas políticas como causal de genocidio. Comentó además a lavaca: “Esto ha sido extraordinario. Después de muchos años la justicia llega, es un remedio para la víctima y para la sociedad. Esto fortalece a las instituciones democráticas y al Estado de Derecho para que no se vuelva a repetir. Está claro que las sociedades n pueden avanzar sobre la base de los crímenes más aberrantes. Es un paso importante de la sociedad argentina. Las absoluciones en definitiva son de personas que están involucradas en otras causas. Pero que haya absoluciones demuestra que estos juicios son legítimos y que las sentencias no están escritas de antes”.

María Adela Antokoletz (hija de una de las fundadoras de Madres, un hermano desaparecido): “Mi hermano estuvo en la ESMA, pero este no es mi juicio sino de toda la población y de todos los países hermanos que tienen personas desaparecidas en mi país. Durante el juicio, claramente los testimonios fueron desgarradores. Pero son la palabra, y a veces los silencios, los que dijeron la verdad sobre lo que ocurrió en este país”.

Fuente: http://lavaca.org/notas/condena-en-el-juicio-a-la-esma-la-hora-de-los-aparecidos/

 

"A Europa le iría mejor si se hundiera"

Según Paul Krugman

 

La Jornada

 

 

Madrid, 25 de octubre. El premio Nobel de Economía 2008, Paul Krugman, habló sobre la crisis de deuda soberana en Europa, y afirmó que la amarga verdad es que cada vez da más la impresión de que el sistema del euro está condenado. A Europa le iría mejor si se hundiera cuanto antes, indica en un artículo en El País, en el cual acota que Grecia, donde comenzó la crisis, no es más que un triste asunto secundario.

El peligro claro y actual proviene más bien de una especie de pánico bancario respecto a Italia, la tercera economía más grande de la eurozona, cuyos acreedores exigen tipos de interés altos que hacen probable la falta de pago, creando un circulo vicioso, dijo.

El actual profesor de economía en la Universidad de Princeton aseguró que la respuesta implica disponer de un fondo que, en caso necesario, preste a Italia y a España dinero suficiente para que no necesiten adquirir préstamos a tipos elevados.

Dicho fondo probablemente no tendría que usarse, puesto que su mera existencia debería poner fin al ciclo del miedo, pero la posibilidad de un préstamo a escala verdaderamente grande, sin duda por valor de más de un billón de euros, tiene que estar ahí, anotó.

Krugman consideró que el problema es que las diversas propuestas para la creación de dicho fondo siempre requieren, al final, el respaldo de los principales gobiernos europeos, cuyas promesas a los inversionistas deben ser creíbles para que el plan funcione.

Italia es uno de esos gobiernos importantes, pero no puede conseguir un rescate prestándose dinero a sí misma, y Francia, la segunda economía de la zona euro, se ha mostrado vacilante últimamente, lo que despierta temores de que se sume a la lista de países en crisis.

Respecto al Reino Unido, Japón y Estados Unidos, con grandes deudas, déficit y capacidad de conseguir préstamos a intereses bajos, el secreto es que siguen teniendo sus propias monedas y los inversionistas saben que, en caso de necesidad, podrían financiar sus déficit imprimiendo más moneda.

Si el Banco Central Europeo respaldara de modo similar las deudas europeas, la crisis se suavizaría enormemente, dijo.

Consideró que Europa necesita una inflación general moderadamente más alta, pues una tasa de inflación general demasiado baja llevaría al sur de Europa a años de deflación demoledora, lo que garantizaría desempleo elevado continuo y cadena de impagos, advirtió.

 

http://www.jornada.unam.mx/2011/10/26/economia/026n2eco

 

¿Qué quiere Obama?

Atilio A. Boron

Rebelión

 

 

¿Por qué Barack Obama querría reunirse con la Presidenta Cristina Fernández? Sobran las conjeturas, pero las escasas –y además crípticas- declaraciones procedentes de Washington remiten a una agenda conteniendo temas tales como la supuesta presencia de grupos terroristas iraníes operando en América Latina, y particularmente en la Argentina, y la excesiva labilidad de la legislación nacional con relación al lavado de dinero, lo que habría originado el bloqueo estadounidense a créditos otorgados por el BID y el Banco Mundial. En realidad, estos asuntos carecen de sustancia: lo de los iraníes es en parte la clásica paranoia de Washington y en parte una táctica para presionar a nuestros países y para aislar, satanizándolo, a Irán. Lo del lavado de dinero es otra acusación que carece de fundamento, sobre todo cuando quien la esgrime tiene a unos cien kilómetros de la Casa Blanca uno de los paraísos fiscales más importantes del mundo: el Estado de Delaware, que publicita por todos los medios que cualquier compañía que instale allí su casa matriz, aunque sea una diminuta oficina, estará eximida del pago de impuestos por todos los ingresos producidos por sus subsidiarias que desarrollen sus actividades fuera de los pequeños límites de este estado, sea dentro de los Estados Unidos o en el exterior. Por eso un sesenta por ciento de las 500 mayores transnacionales listadas en la revista Fortune tienen sus oficinas centrales en ese estado, que además se vanagloria de tener una legislación que “no pone límites a la usura”.

Dados estos antecedentes y teniendo siempre en cuenta que jamás se puede confiar en la mentirosa benevolencia del imperialismo y sus voceros (el que tenga dudas mejor que medite sobre lo ocurrido con Gadafi), la hipótesis que se perfila con más fuerza para comprender el sentido de la invitación de Obama diría que está motivada por el deseo de sabotear, por ahora diplomáticamente, el proyecto integracionista representado por la UNASUR y aislar a los gobiernos de izquierda de la región, principalmente a la Venezuela de Chávez. El Acuerdo del Pacífico, recientemente promovido por Estados Unidos y secundado por México y en Sudamérica por Colombia, Chile y Perú, equivale a introducir el Caballo de Troya dentro de la UNASUR. No es casual que la inesperada solicitud para reunirse durante la Cumbre del G-20 en Cannes haya llegado poco después de que la Presidenta pronunciara dos discursos enfáticamente ‘unasurianos’ el domingo por la noche luego de su rotunda victoria electoral. La enfermiza obsesión de Washington es acabar con el experimento bolivariano y apoderarse del petróleo de Venezuela, como ya lo hizo con el de Irak y Libia. Para los halcones estadounidenses -de los cuales Obama es su solícito mayordomo- la estrecha relación consolidada a lo largo de estos años entre la Argentina y Venezuela es un molesto obstáculo que debe ser removido cuanto antes. La estrategia para el 2012, año en que se celebrará la crucial elección presidencial en Venezuela, es llegar a ese momento con un Chávez debilitado por una intensa campaña desestabilizadora –¡que ya ha comenzado!- que incluye desabastecimientos selectivos de artículos de primera necesidad, asesinatos al voleo hechos por paramilitares colombianos infiltrados ilegalmente en el país o lúmpenes reclutados para instalar una sensación de absoluta inseguridad ciudadana, y la permanente gritería de la “prensa independiente” (en realidad, la única instancia organizativa que tiene la derecha habida cuenta de la debilidad de sus expresiones partidarias) denunciando supuestas restricciones a la libertad de prensa en un país en donde desde un periódico, una radio o una televisora se puede hacer la apología del magnicidio o incitar a la violencia con total impunidad. Dentro de esta estrategia global, apartar a la Argentina del proyecto integracionista sudamericano es un paso táctico de la mayor importancia. Avanzar hacia ese objetivo parecería ser el único sentido posible de la invitación hecha por el mandatario estadounidense.

 

martes, 25 de octubre de 2011

La catástrofe que nos amenaza

Situación económica

 

Teo Navarro

Página Roja

 

 

La crisis de la deuda pública europea continúa agravándose sin que Angela Merkel, Sarkozy y demás jerifaltes de la Unión Europea sean capaces de ponerle freno. El pacto al que llegaron tan trabajosamente en julio, para “rescatar” por segunda vez a Grecia y “salvar al euro”, hizo aguas en menos de una semana.

El precio de la deuda de la periferia se dispara, tocando de lleno a Italia y al Estado español, ambos en una situación cada vez más apurada (sin hablar ya de Grecia o Portugal). El problema afecta, además, a lo que más les preocupa: la gran banca europea. Hace 10 días quebró el banco franco-belga Dexia, del tamaño del BBVA. Pero no era éste un caso aislado, sino el que puso en evidencia que los bancos alemanes y franceses (y tras ellos los demás) se enfrentan a la amenaza de quiebra. La crisis se agrava porque alemanes y franceses están a la greña para ver cómo reparten los costes de esta crisis, sin que consigan alcanzar un acuerdo. Todo ello, además, en un momento en que se anuncia una recesión económica internacional. Es la propia zona euro y la Unión Europea, la Europa del capital, lo que está en cuestión.

A las puertas de un nuevo rescate masivo de la banca

Estamos a las puertas de un nuevo rescate masivo de la banca europea por parte de los gobiernos, a costa de generar otra montaña de deuda pública, que se añadirá a la actual y que será imposible de manejar. La salida que proponen es una espiral infernal sin solución, cuya base es el saqueo de la clase trabajadora y de los pueblos, a los que hunde cada vez más en la pobreza.

Prepararse para el 21-N

Grecia, que ya va en su quinto plan de ajuste, y Portugal, en el tercero, son el ejemplo de lo que prepara la UE para nosotros. Es el plan de choque que, apoyándose en el trabajo hecho por Zapatero, prepara Rajoy para después de las elecciones y que llevará adelante en combinación con los gobiernos autonómicos.

Vamos a encontrarnos con muchos despidos en la Administración, en especial en Ayuntamientos (muchos de ellos en quiebra) y en Autonomías. Van a imponer grandes recortes salariales a los empleados públicos y fuertes subidas de impuestos a la población trabajadora (mientras a los empresarios se les bonificará aún más). Van a lanzarse, siguiendo el ejemplo criminal de los gobiernos de Artur Mas y Esperanza Aguirre, a desmantelar la sanidad y la educación públicas y a cargarse los fondos de asistencia social. Con la reforma laboral de Zapatero y lo que aporte Rajoy, nos enfrentamos al cuestionamiento generalizado de los convenios y a una ofensiva patronal para echar atrás conquistas laborales arrancadas en décadas. Todos los analistas anuncian, por otra parte, que el paro superará pronto los 5 millones, mientras más y más trabajadores se quedan sin ningún ingreso y los desahucios se disparan.

NO PAGAR LA DEUDA PÚBLICA A LOS BANQUEROS Y ESPECULADORES

Los Zapatero, Rajoy y Artur Mas nos martillean día tras día diciendo que los recortes son inevitables porque, “nos guste o no”, tenemos una Deuda y hay que pagarla. Todos repiten la misma cantinela, coreada por “expertos” a sueldo y amplificada por los medios de comunicación. Es como si fuera “palabra de Dios” que no puede ser puesta en duda. Incluso han hecho aprobar una reforma constitucional exprés que establece que el pago de la deuda es la “prioridad absoluta” de los poderes públicos.

Si aceptamos esta premisa, entonces la discusión queda ya reducida a si recortamos más o recortamos menos, si quitamos de aquí o quitamos de allá. Lo que ya no se discute es que es necesario recortar, "porque no hay más remedio".

La necesidad absoluta del pago de la deuda es una de sus grandes reglas de juego. Una regla que, si la aceptamos, ya no hay nada que hacer porque estaríamos derrotados de antemano. El pequeño problema es que toda su argumentación es una falacia, una trampa hecha con la única intención de engañar a la población.

En primer lugar, porque la Deuda ha sido decidida completamente a espaldas del pueblo. A nadie se nos ha consultado si teníamos que endeudarnos y porqué. Lo han decidido ellos, los diferentes gobiernos, en combinación con los grandes empresarios amigos y con los banqueros. El pueblo nunca ha sido informado ni ha decidido nada al respecto. ¿Por qué, entonces, ha de pagarla?

En segundo lugar, porque es una Deuda ilegítima que no responde en absoluto a las necesidades populares. La Deuda se ha creado porque se han gastado miles de millones para salvar a los banqueros. Porque han hecho enormes y deficitarias inversiones en el AVE, en beneficio de las grandes constructoras y los suministradores extranjeros y a costa de los trenes de cercanías y otros servicios ferroviarios populares. Porque han construido costosos aeropuertos donde no vuelan aviones. Porque han dedicado partidas enormes a comprar un carísimo armamento que no hace ninguna falta. Porque han gastado y gastan una millonada para financiar las aventuras militares en Afganistán o en Líbano. Porque han reducido los ingresos públicos en miles y miles de millones para rebajar los impuestos a los empresarios y a los ricos, que se han hecho cada vez más ricos.

En tercer lugar, porque el pago de la Deuda es a costa de un gravísimo deterioro de la vida colectiva provocado por el desmantelamiento y privatización de la sanidad y la educación públicas, los recortes de las pensiones..., todo con el único objetivo de asegurar los beneficios de una pequeña minoría parasitaria de banqueros que reciben dinero del Banco Central Europeo al 1% y lo prestan a los gobiernos al 5%, al 10% o más.

En cuarto lugar, porque la deuda no es sino un mecanismo de saqueo, convertido en una espiral sin fin. Grecia es la muestra más evidente. Cuanto más se paga, más se debe. Cuanto más se debe, más cara la deuda y más medidas de ajuste, más pobreza y más retroceso económico. Esta espiral criminal sólo puede pararse de una manera: dejando de pagar la deuda.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

 

lunes, 24 de octubre de 2011

EEUU se precipita en la depravación

Jon Kozy

Global Research

 

Traducido del inglés para Rebelión por Sinfo Fernández

 

 

 

La ética protestante definió una vez el carácter estadounidense. Según los sociólogos, fue la responsable del éxito del capitalismo en Europa del Norte y EEUU, pero la ética protestante y el capitalismo son incompatibles, y el capitalismo ha logrado finalmente que se abandone la ética protestante.

Ha aparecido un nuevo ethos que la elite gobernante malinterpreta. Es el ethos de la “gran oportunidad”, el “premio gordo”, la “próxima gran idea”. El camino lento y pausado hacia el éxito es ahora anatema. Aparecer con la siguiente gran idea comercial es el nuevo modelo del sueño estadounidense. Lo único que importa es el dinero. En función de esa actitud, muy pocos en EEUU manifiestan preocupaciones morales. La riqueza es su única recompensa; incluso merece la pena que nos destruyamos a nosotros mismos en el empeño. Y si aún no lo hemos conseguido, muy pronto lo conseguiremos.

Sospecho que a la mayoría de la gente le gustaría creer que las sociedades, no importa en qué hayan basado sus orígenes, mejoran con el tiempo. Por desgracia, la historia demuestra que esto no es así; que las sociedades a menudo degeneran con el tiempo. Los Estados Unidos de América no son una excepción. No fueron benignos en sus orígenes y ahora han descendido a una región de depravación rara vez igualada incluso por las peores naciones de la historia.

Aunque es imposible encontrar cifras exactas que prueben que la moralidad en EEUU ha declinado, hay pruebas por todas partes que lo demuestran. Casi todo el mundo puede citar situaciones en las cuales se sacrifica el bienestar del pueblo en aras de instituciones públicas o privadas, pero parece imposible citar un único ejemplo de una institución pública o privada a la que se haya sacrificado en bien del pueblo. Si la moralidad tiene que ver con cómo se trata al pueblo, uno puede legítimamente preguntarse dónde la moralidad juega algún papel en lo que sucede en EEUU. La respuesta parecer ser: “¡En ningún lugar!” Así pues, ¿qué ha sucedido en EEUU que pueda explicar la actual epidemia de proclamas afirmando que la moralidad ha colapsado? Pues sucede que la cultura ha cambiado drásticamente en el último medio siglo.

Érase una vez que en EEUU el carácter estadounidense se definía en términos de lo que se llamaba ética protestante. El sociólogo Max Weber le atribuía el éxito del capitalismo. Lamentablemente, Max fue poco exigente; se equivocó, se equivocó totalmente. El capitalismo y la ética protestante son incompatibles entre sí. Ésta no pudo ser la responsable de aquél.

La ética protestante (o puritana) se basa en la noción de que el trabajo duro y la frugalidad son dos importantes consecuencias de haber elegido el cristianismo. Si un ser humano trabaja duro y es frugal, se le considera uno de los elegidos. Se creía que esos atributos benéficos hacían de los estadounidenses un pueblo más industrioso que los pueblos de otros lugares (aunque a las sociedades de la Europa protestante se las consideraba casi de segunda mientras que a los pueblos católicos del sur de Europa se les tildaba de perezosos). Algunos afirman ahora que están presenciando la decadencia y caída de la ética protestante en las sociedades occidentales. Como la ética protestante tiene raíces religiosas, la decadencia se atribuye a menudo al auge del laicismo. Pero eso podría aplicarse más fácilmente en Europa que en EEUU, donde el fundamentalismo protestante tiene todavía gran número de seguidores. Por tanto, debe haber alguna otra explicación para la decadencia. Sin embargo, el aumento del laicismo ha llevado a muchos a proclamar que éste ha destruido los valores religiosos junto con los valores morales que la religión enseña. Esa es otra explicación que intenta darse.

En los EEUU coloniales del siglo XVII, la economía era agraria. El trabajo duro y la frugalidad se ajustaban perfectamente a esa economía. Pero EEUU ya no es una sociedad agraria. La economía estadounidense actual se define como capitalismo industrial. Las economías agrarias rara vez producen más de lo que pueden consumir, pero las economías industriales lo hacen cada día. Por tanto, para mantener una economía industrial en funcionamiento, el consumo no sólo debe ser continuo sino que debe incrementarse continuamente.

Dudo que haya un lector que no haya oído que el 70% de la economía estadounidense se basa en el consumo. Pero el 70% de uno es 0,7; de dos, 1,4; de tres, 2,1, etc. Como la economía crece desde una unidad de PNB a dos unidades, el consumo debe crecer de 0,7 unidades a 1,4 unidades. Pero si se incrementa continuamente el consumo, eso no es compatible con la frugalidad. Una economía industrial necesita que la gente gaste y gaste y gaste mientras que la frugalidad requiere que la gente ahorre y ahorre y ahorre. La economía estadounidense destruyó la ética protestante y los puntos de vista religiosos en los que se basaba. El consumo desbordado sustituyó al trabajo duro y al ahorro.

En su “Riqueza de las naciones”, Adam Smith afirma que el capitalismo beneficia a todos ya que al actuar en interés de uno mismo se beneficia a los demás. Ahora se nos está diciendo que: “Ahorrar más y recortar la deuda debería ser un buen plan para afrontar la recesión. Pero si todo el mundo hace eso, las cosas solo irán a peor… lo que más necesita la economía es que los consumidores gasten más libremente”. Adam Smith mantuvo en su cabeza la posibilidad de una gran recesión, pero ningún economista lo admitirá. “Un entorno donde todo el mundo quiera ahorrar no puede producir crecimiento. Hay que vender la producción y para eso son necesarios los clientes”.

Ahorrar es (al parecer) bueno para los individuos pero malo para la economía, que necesita que el gasto se incremente continuamente. Si un economista me hubiera dicho eso a la cara, le habría dicho que eso significa claramente que hay algo fundamentalmente equivocado en la naturaleza de la economía, que significa que la economía no funciona para satisfacer las necesidades de la gente sino que la gente existe solo para satisfacer las necesidades de la economía. Aunque no lo parezca, una economía así esclaviza a la gente a la que afirma servir. Así pues, efectivamente, el capitalismo industrial ha perpetuado la esclavitud; ha vuelto a esclavizar a todos los que una vez consiguieron emanciparse.

Cuando el consumo sustituyó al ahorro en la psyque estadounidense, el resto de la moralidad se hundió con ella en la depravación. La necesidad de vender requiere de la mercadotecnia, que no es otra cosa que una guarida de embusteros. Después de todo, toda la empresa se basa en el libro “Propaganda” publicado en 1928 por Edward L. Bernays. La cultura estadounidense se ha visto inundada por un tsunami de mentiras. El marketing se ha convertido en la actividad predominante de la cultura. Nadie puede aislarse de ella. Todos contribuyen a mantenerla, los hombres de negocios, los políticos y los medios. Nadie puede estar seguro de que alguien le está diciendo la verdad. Ningún código moral puede sobrevivir en una cultura de deshonestidad, ¡ninguno!

Al haber subvertido la ética protestante, la economía destruyó cualquier ética que EEUU hubiera alguna vez promovido. Se convirtió en una sociedad sin ethos, en una no-ciedad sin propósito humano alguno. Los estadounidenses se han convertido en corderos propiciatorios en aras de las máquinas. Después, un nuevo ethos surgió del caos, uno que la elite gobernante malinterpreta totalmente.

Se afirma a menudo que Washington ha perdido el contacto con los estadounidenses a los que gobierna, que ya no entiende a su pueblo ni cómo funciona su cultura común. Washington y las elites de la nación no se dan cuenta, pero la cultura ya no distingue entre lo correcto y lo incorrecto o entre el trabajo duro y la frugalidad por encima de la pereza y el despilfarro. Los estadounidenses de hoy están buscando la “gran oportunidad”, el “premio gordo”, la “siguiente gran idea”. El Sueño Americano se ha quedado reducido a “¡tener exitazo!”. El camino lento y pausado hacia el éxito es anatema. Observen “American Idol”, “The X Factor” y “America’s Got Talent” y contemplen las hordas mongolas que se presentan a las audiciones. Toda esa gente, en su inmensa mayoría, no ha trabajado nunca duro. Calculen la cantidad de gente que regularmente apuesta a la Lotto. Esas apuestas no necesitan de ningún trabajo en absoluto. Lo que toda esa gente quiere es conseguir el premio gordo. ¿Y quienes son nuestros más ensalzados hombres de negocios? ¡Los empresarios! Los empresarios son, en su mayoría, un fiasco, aunque hay notables excepciones. Sin embargo, el problema con los empresarios es la alta estima en la que se les tiene. Pero el único valor con el que se les relaciona es con las sumas de dinero que esos empresarios han hecho. Raramente oímos nada acerca de los viles métodos con los que lo han conseguido. Bill Gates y Mark Zuckerberg, por ejemplo, casi nunca aparecen con una imagen de personas con excelentes caracteres morales, pero en una economía sin escrúpulos morales, a nadie le importa eso; todo lo que importa es el dinero. Teniendo en cuenta esa actitud, ¿por qué en esta sociedad debería alguien manifestar preocupaciones morales? Pocos en EEUU lo hacen. Por eso, aunque la elite estadounidense habla todavía de la necesidad de producir una fuerza de trabajo que se adecue a las necesidades de la industria, la gente no quiere saber nada de eso.

Las elites se lamentan a menudo del fracaso del sistema educativo y han estado intentando corregirlo sin éxito desde hace varias décadas. Pero si uno recuerda que gran parte de los actuales empresarios de EEUU son desertores de la universidad, ¿cómo podemos convencer a los jóvenes de que tener una educación universitaria es un esfuerzo que merece la pena? Como Bill Gates, Steve Jobs y Mark Zurckerberg han demostrado, aprender a escribir software no necesita de un título universitario. Ni tampoco para ganar la Lotto o un lugar en el “American Idol”. Que te recluten para la liga nacional de fútbol puede requerir un tiempo en la universidad, pero no se necesita una licenciatura. Todo espíritu empresarial necesita de una nueva idea comercializable.

Ocio y deporte, loterías y juegos, productos de consumo que la gente nunca necesitó durante miles de millones de años son ahora el producto de la cultura estadounidense. Pero ni siquiera son productos, es algo insignificante; no pueden formar la base de una sociedad humana próspera y estable. Es una cultura gobernada por único atributo: la riqueza, ¡sin que importen los métodos utilizados para conseguirla!

La capacidad humana para el autoengaño no tiene límites. Los estadounidenses se han engañado a sí mismos para creer que la riqueza absoluta, la suma total de riqueza, en vez de cómo se distribuye, lo compensa todo. No importa ni cómo se ha conseguido ni lo que pueda hacerse con ella. La riqueza total es su única recompensa; incluso merece la pena destruirte con tal de conseguirla. Y si aún no lo hemos hecho, lo conseguiremos muy pronto.

La historia describe muchas naciones que se volvieron depravadas. Ninguna llegó nunca a reformarse a sí misma. No podemos esperar que aparezca ningún bello niño que deshaga la catástrofe del toque de Midas. El dinero, después de todo, no es una de las cosas que los seres humanos necesiten para sobrevivir, y si el dinero no se utiliza para producir y distribuir las cosas necesarias, la supervivencia humana es imposible, sin que importe cuánta riqueza hayamos finalmente acumulado.

John Kozy es un profesor jubilado de filosofía y lógica que escribe acerca de cuestiones sociales, políticas y económicas. Tras servir en el ejército estadounidense durante la guerra de Corea, pasó veinte años trabajando como profesor de universidad y otros veinte como escritor. Ha publicado un libro de texto sobre lógica formal y numerosos artículos en revistas académicas y una pequeña cantidad de revistas comerciales; ha escrito asimismo una serie de editoriales como invitado de varios periódicos. Sus artículos pueden encontrarse en: www.jkozy.com/

Fuente:

http://www.globalresearch.ca/index.php?context=va&aid=27180